Tegucigalpa, Honduras
El enfoque psicosocial, es una perspectiva amplia de trabajo en los territorios con una larga tradición en Latinoamérica. El mismo hace referencia a que una persona es el resultado de sus relaciones sociales y de los contextos históricos-políticos en los que se desarrolla. Así también, los daños y traumas que se producen en contextos de violencia política y violación de DDHH, sólo pueden ser entendidos en su dimensión histórica social. Desde esta comprensión, se apunta a trabajar en la mitigación de los impactos de esas violencias y a fortalecer las respuestas de afrontamiento a esas situaciones. Es decir, que no se puede pensar el trabajo con comunidades sin comprender y conocer el contexto que les afecta tanto a las personas en su carácter individual, como en la colectividad, y que contiene las capacidades, recursos y fortalezas de cada comunidad.
En la tarea que realiza el equipo de PWS-Honduras, estamos en constante contacto con personas y comunidades víctimas de diversos tipos de violencias, como la que ejerce el modelo extractivista, la violencia política estatal, y la violencia socioeconómica e histórica que padecen quienes habitan los territorios en donde hoy se encuentran los bienes comunes que, este modelo, del mal llamado “desarrollo”, los obtiene para mercantilizarlos, imponiendo todo su poder y fuerza, sin importarle la vida de las defensoras y defensores en las comunidades.”
Por lo tanto, el enfoque psicosocial se vuelve imprescindible en el abordaje del trabajo con estas comunidades. Si bien nuestro mandato de no injerencia y neutralidad en el marco del acompañamiento internacional nos guía en el accionar en territorio, es inevitable que todo el contexto de lucha y defensa de DDHH nos impacte de manera subjetiva, y de alguna manera nos haga sentir y vivenciar aquella violencia de la que somos observadorxs, y por lo tanto, tenga efectos en las relaciones y funcionamiento del equipo de trabajo.
Se ha comprobado que la repercusión de la violencia, afecta al punto de obstaculizar el trabajo y volverse así un factor de riesgo para quienes estén siendo parte del desarrollo del trabajo. Es aquí donde cobra relevancia otra parte de la perspectiva psicosocial, y que es el cuidado de los equipos de trabajo y el autocuidado en cuanto la salud mental de quienes los conforman. Como personas que trabajan en este contexto, y que venimos de diversos contextos particulares, nos volvemos parte sin ser los receptores directos de la violencia. Es por esto que atender el impacto subjetivo derivado de la tarea de acompañamiento, se transforma en un tema de interés institucional que debe poseer, no sólo la atención, sino incorporarse como un valor organizacional que cuide a los equipos y a las comunidades acompañadas.
Entonces, ¿cómo acompañamos a quienes acompañan? En el equipo de PWS Honduras, desde el registro de estos efectos, hemos desarrollado diferentes estrategias para atender y cuidar al equipo de trabajo, una de ellas es la realización de una jornada de reflexión en donde todo el equipo participa con el objetivo de conformar un espacio de encuentro y diálogo sobre cómo nos sentimos en la realización de las tareas, y poder definir colectivamente un plan de atención al respecto. Junto a esta jornada, se han definido reuniones mensuales de seguimiento de las acciones definidas en el plan de atención y brindar algunas técnicas de autocuidado, relajación y descarga emocional.
Como voluntaria, he recibido junto a otras personas del equipo, formación sobre el enfoque psicosocial como parte de la estrategia institucional que incluye la capacitación en esta temática. Sumado a mi formación de base como psicóloga, esto me ha permitido facilitar los espacios de reflexión y seguimiento, en donde el trabajo del equipo ha mostrado la necesidad de atender la salud mental individual y grupal, el manejo del estrés y ansiedad, y también se han definido los pasos a seguir partiendo del reconocimiento de los recursos y capacidades internas disponibles.
Este es el inicio de una tarea muy importante en cuanto al crecimiento organizacional de PWS, que le suma calidad al trabajo que realizamos con las comunidades, porque nos ayuda a comprender la problemática desde un enfoque más amplio, integral y respetuoso de la complejidad que presentan, y además porque cuida y contiene a las personas de sus equipos, promoviendo la salud mental integral y el bienestar colectivo, previniendo los impactos negativos que puedan obstruir esta ardua tarea de acompañar comunidades y la de acompañar(nos) como equipo.
Artículo de Evelina Vagas, psicóloga. Evelina fue acompañante internacional de PWS/ACO-H en Honduras, desde enero 2020 hasta abril 2021
Jornada de reflexión y autocuidado del equipo PWS-Honduras, marzo de 2021