Bernhard Erni, miembro del Comité de Peace Watch Switzerland (PWS) se encontró en Tegucigalpa
con un joven sociólogo hondureño. Lo invitó a una conversación sobre la situación anteriormente a
las elecciones en Honduras y sus expectativas en relación con éstas.

criminalización de los ambientalistas.
Ever, en Honduras se elegirá un nuevo parlamento y un nuevo presidente el 28 de noviembre. ¿Qué
ha logrado el gobierno saliente en los cuatro años pasados?
Cabe destacar que el actual gobierno está de manera ilegítima estos últimos 4 años, ya que en la constitución hondureña no está permitida la reelección, sin embargo este es el segundo periodo como presidente de Juan Orlando Hernández, quien de manera descarada, trastoco los resultados en el 2017, con la intención de perpetuarse en el poder. En términos generales, el actual gobierno no ha logrado nada positivo para el país, sus 8 años de gobierno, más 4 del otro expresidente que es de su misma institución política, han degradado el país en todos los niveles y condiciones sociales, sumidos en la miseria, sin oportunidad de empleo, asediados por la inseguridad y crimen organizado y pues lo más crítico y peligroso; coludidos con el narcotráfico, del cual el presidente parece ser parte, así como sus distintos funcionarios a nivel nacional, coordinando con su hermano quien está condenado por narcotráfico en EEUU, la red de tráfico de droga más grande de centro américa, así pues, que en términos puntuales no hay nada positivo que se haya logrado de este gobierno.
Estamos ante nuevas elecciones. ¿Con que obstáculos hay que contar?
La sociedad hondureña tiene un reto muy grande en este momento y muy específicamente ante este proceso electoral, ya que la misma está totalmente polarizada, entre los seguidores afines al gobierno, que a base de clientelismo y dadivas se mantienen firmes al gobierno, y la mayoría de la población que está a favor de un verdadero cambio, sin embargo el gobierno a través del dinero del narcotráfico y usando los recursos del Estado, han orquestado una serie de estrategias que van encaminadas en la compra de votos a cada ciudadano, regalías alimenticias, campañas de desprestigios, difamación, odio, misoginia, a quienes le adversan (en este caso a la candidata del partido Libertad y Refundación LIBRE), intimidación a través de grupos delictivos organizados, persecución selectiva por parte de los entes represores del Estado, es decir, los militares y policía y por último, utilizando el congreso nacional para aprobar leyes penales en contra de quienes se quieran manifestar ante un posible fraude electoral, el cual es el mayor obstáculo al que nos enfrentamos.

¿Qué espera Ud. de estas elecciones?
Esperamos se respete la voluntad de la mayoría, deseamos que se celebre un proceso electoral limpio, trasparente y pacífico, en donde prive la decisión del pueblo. Se espera que no haya injerencia de los Estados Unidos en el resultado de las elecciones y que respeten la decisión de las y los hondureños.
¿Qué impacto tendrá esto en la situación de los derechos humanos en el país?
Por la forma que se ha manejado el gobierno en estos 12 años que tienen en el poder, se espera un atropello directo y un abuso desmesurado de los derechos humanos, ya que su actuar en todos estos años, ha sido así. Al punto que ha llegado a expulsar a organizaciones internacionales de derechos humanos, es posible que el impacto a la violación de derechos humanos en Honduras, se acrecenté en este mes, sobre todo después de los comicios electorales.
Ever, Ud. Ha escuchado ya algo de Peace Watch, que está trabajando en Derechos Humanos. ¿Qué desafíos enfrentará Peace Watch? ¿En qué medida el trabajo de acompañamiento también puede ser importante en el futuro?
Como organización, tiene grandes desafíos, ya que se visualiza una serie de condiciones hostiles para las comunidades y organizaciones sociales, es necesario tomar estrategias que nos permitan garantizar los acompañamientos a quienes se les brindan o a quienes lo requieran o lo soliciten, ya que el trabajo realizado desde PWS es de suma importancia.
Ever, muchas gracias