Gracias

Artículo de Julien Christe, acompañante internacional de derechos humanos de Peace Watch Suiza (PWS) en Honduras.

Tegucigalpa, Honduras

Ahora que mi trabajo con Peace Watch Suiza en Honduras está llegando a su fin y que el programa está a punto de celebrar su 5° aniversario, me pareció interesante hacer un balance de lo que se ha logrado. Durante estos 5 años logramos fortalecer nuestra organización y realizamos cientos de acompañamientos. Durante estos acompañamos a  muchos juicios, manifestaciones, eventos y desalojos. A veces era complicado tanto física como psicológicamente. Ver a personas perder sus hogares, enfrentar cargos falsos y arriesgarse a pasar años en prisión por delitos que no cometieron, ser reprimidas en protestas con gases lacrimógenos o disparos mientras simplemente ejercen sus derechos o incluso compartir su vida cotidiana cuando tienen que vivir en un estado de alerta constante por las amenazas que reciben, es siempre difícil y genera en nosotros un sentimiento de impotencia y rabia.

Pero también conocimos a grandes personas y sentimos que lo que estábamos haciendo les estaba ayudando en sus luchas. Por ello quiero agradecer a todas las personas que nunca han contado su tiempo para que podamos llevar a cabo este trabajo. Muchas gracias a Marianne, Guido, Jimmy, Sarah, Bernardo, Heidy, Sergio, Cintia, Christophe, Alessandra, Cecilia, Isabel, Ueli, Emmy, Gloria, Jhonny, Evelina, Daniel, Anna, Eunice, Ever, Kim, Deisy, Marina, Don Luis, Annina, Céline, Heide, Lise, Valeria, Nicolás, Mireia y Karla. Sin ellos y su inquebrantable dedicación nada hubiera sido posible.

También quisiera agradecer a las personas a las que hemos acompañado por brindarnos su confianza y por aceptarnos en sus vidas, en su trabajo y en sus comunidades. Ya sea la gente de Reitoca, Namasigüe, Zacate Grande, El Triunfo, Guajiquiro, Choluteca, Yoro y Atlántida pero también los abogados y trabajadores de la Red de Abogadas Defensoras de Derechos Humanos, el Bufete Justicia para los Pueblos, COFADEH, MASSVIDA, MADJ, ACI-Participa , C-Libre y todos los demás que tuvimos la oportunidad de acompañar. Todos me demostraron que aún existen mujeres y hombres valientes que están dispuestos a arriesgar su salud física y mental y en ocasiones su libertad y su vida por defender un río, un bosque, una montaña o sus derechos fundamentales.

Esta es una actividad riesgosa que todas estas personas han llevado a cabo sin otra compensación que la esperanza de poder asegurar una vida mejor para su familia, su comunidad y en general para su país. Al contrario de lo que generalmente afirman las empresas que los acusan y criminalizan, casi todes pierden dinero en sus luchas. En una sociedad patriarcal, neoliberal, clasista y racista, nos demuestran día tras día y nos empujan a darnos cuenta de que otro mundo y un “desarrollo” más humano no sólo es posible sino necesario.

A nivel más personal, un gran agradecimiento a todas estas personas por compartir conmigo los días y las noches en las comunidades, las montañas, las canchas y en las calles de Honduras pero también en los buses, carros, moto-taxi y pailas y por haber podido intercambiar sobre la vida, el país y sobre nuestras vidas. Así como por el apoyo y la amistad que me han mostrado. Gracias a todos ustedes aprendí que un trabajo puede ser no solo interesante sino también útil. Espero que esto sea solo un hasta luego y estoy seguro de que nuestros caminos se volverán a cruzar en el futuro. Cuídense.

Espero que este país finalmente cambie y permita que todas estas personas continúen con sus luchas en el futuro sin tener que arriesgar sus vidas. Pero, mientras sea necesario, sé que pueden contar con el apoyo de nuevas personas que también creen que estas luchas son justas y útiles. Y que nuestro lema es y seguirá siendo que “Lo más importante es la comunidad” (Christophe, 2018).


Foto: Acompañamiento de una manifestación del MADJ (Moviemiento Amplio por la Dignidad y la Justicia) en Tegucigalpa. PWS 2022

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